
El repiqueteo
Escuchó el silbido, pero se negó a obedecer. Por primera y última vez, se atrevió a desarmar el desfile improvisando un paso de su propia cosecha. Enseguida cayó desplomado, pero antes de cerrar Sigue leyendo
Escribo para contar pero sobre todo para contarme. La escritura es una ventana de la que me cuelgo para entender, si eso es posible, el mundo. Uno que evidencia que detrás de cada paisaje, de cada lugar, de cada persona, hay una historia que desvela la inmortalidad de la complejidad en la naturaleza humana.
A veces menos es más.
Escuchó el silbido, pero se negó a obedecer. Por primera y última vez, se atrevió a desarmar el desfile improvisando un paso de su propia cosecha. Enseguida cayó desplomado, pero antes de cerrar Sigue leyendo
Las primeras puntadas pasaron casi inadvertidas. Apenas un leve escozor. La punta de la lengua buscó recorrer las pequeñas heridas pero las prisas, opresoras, le arrojaban dentelladas a doquier. Recién cuando el Sigue leyendo
Con precisión de cirujano comenzó a marcar, justo en el medio de la eme, una línea un poco más ancha y profunda. Ni siquiera la primera gota de sangre que brotó de la Sigue leyendo